793 Aniversario de la Aparición de la Santísima Virgen de la Cabeza
SOLEMNE NOVENA EN SU HONOR
Consideración para el octavo día de novena: Por la disponibilidad de las personas hacia el prójimo.
DÍA OCTAVO
1.- Oración para todos los días.
Virgen Santísima de la Cabeza, Madre de Dios y de la Iglesia, que has querido establecer tu Santuario en esta Sierra Morena para auxilio de los cristianos, consuelo de los afligidos, refugio de los pecadores y aliento de los peregrinos y romeros, dígnate acoger con amor maternal las súplicas que durante esta novena te dirigen tus hijos y devotos. Y, pues, tu Hijo Jesucristo te constituyó Madre de todos los hombres, intercede ante Él para que sepamos caminar siempre como tú, siguiendo las huellas de tu Hijo hasta que alcancemos las cumbres de la gloria en compañía de tu Hijo que vive y reina con el Padre en la unidad del Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén.
2.- Reflexión para este día: EL MAGNIFICAT DE MARÍA.
«Dijo María: Mi alma engrandece al Señor y exulta de júbilo en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la humildad de su sierva; por eso todas las generaciones me llamarán dichosa",... (LC. 1, 46 ss). «Las palabras usadas por María en el umbral de la casa de Isabel -escribe Juan Pablo II- constituyen una inspirada profecía de su fe en la que la respuesta a la palabra de la revelación se expresa con la elevación espiritual y poética de todo su ser hacia Dios. En estas palabras (del Magníficat)... se vislumbra la experiencia de María, el éxtasis de su corazón. Resplandece en ellas un rayo del misterio de Dios, la gloria de su inefable santidad, el eterno amor que, como un don irrevocable, entra en la historia del hombre (María) es consciente de que en ella se realiza la promesa hecha a los padres, y, ante todo, en favor de Abrahán y su descendencia para siempre» (R.M. 36).
3.- Preces.
Padre de nuestro Señor Jesucristo, que ensalzas a los humildes y abates a los soberbios, escucha las peticiones que te dirigimos desde nuestra pequeñez de pecadores:
- Por todas las mujeres del mundo para que respeten y mimen en todo momento la nueva vida que llevan en sus entrañas, roguemos al Señor.
- Por los pueblos oprimidos y explotados por los poderosos de este mundo, para que poniendo los ojos en la humilde doncella de Nazaret, trabajen por su progreso económico, cultural, social, religioso y moral, roguemos al Señor.
- Por todos los gobernantes del mundo para que unan sus esfuerzos en favorecer a los sectores más pobres y subdesarrollados, roguemos al Señor.
- Por todos nosotros para que, al estilo de María, tengamos una actitud continua de agradecimiento al Señor por todos los beneficios que a diario está derramando sobre nosotros, roguemos al Señor.
- Por el pueblo de Israel, el primero a quien Dios habló desde antiguo por lo profetas, para que el Señor acreciente en los judíos el amor de su Nombre y la fidelidad a la Alianza que selló con sus padres, roguemos al Señor.
4.- Oración final.
Padre de todos los hombres, que has querido hermanarnos a todos en tu Hijo Jesucristo, nacido de una mujer, haz que los que nos preciamos de ser cristianos y devotos de la Virgen María bajo la invocación de Nuestra Señora de la Cabeza, nos comprometamos seriamente en la lucha por un mundo mejor, más justo, más humano y más cristiano. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Por Cristo nuestro Señor. Amén.
